Con el objetivo de denunciar y actuar ante las múltiples violencias hacia las mujeres que defienden la naturaleza y los derechos humanos, el 5 de septiembre se presentó en el Centro Cultural de España en Lima (Perú) campaña “En defensa de nuestros cuerpos y territorios“, en alianza con las campañas Rexistir y Defensoras no están solas que integran más de un centenar de organizaciones de mujeres y derechos humanos.
Esta campaña buscará concientizar a la población sobre la situación que se agrava en el contexto del accionar de las extractivas y un estado contemplativo que atacan a las mujeres defensoras violentando sus cuerpos y territorios.
“A nosotras nos golpean, nos dicen revoltosas, terrucas, antimineras, pero nosotras somos defensoras de nuestra agua y de nuestros territorios con la conciencia limpia”, dice Yovana Medina de la organización de mujeres defensoras de la Pachamama de Cajamarca. “A los corruptos los dejan sueltos, a las defensoras y defensores nos quieren meter a la cárcel”, afirma Yolanda Flores de Derechos Humanos y Medio Ambiente de Puno. “Nosotras decimos la verdad sobre la contaminación en nuestros pueblos, que afecta nuestros cuerpos y nuestras vidas”, señala Elsa Merma de la Asociación de Mujeres Defensoras del Territorio y Cultura Kana de Espinar (Cusco). Las participantes y otras defensoras de Cajamarca, Cerro de Pasco, Cusco, La Libertad, Huancavelica y Puno quienes demandaron erradicar la violencia de género que sufren en sus luchas, por parte de empresas extractivas y el propio Estado que muchas veces las persigue judicialmente.
Teresita Antazú, lideresa de la comunidad Yanesha, destacó la “necesidad de generar mayor participación política de las mujeres aún a pesar del machismo, la violencia y los intereses políticos que intentan que las mujeres desistan de sus luchas”.
GANADORES DEL CONCURSO PERIODÍSTICO
En el marco de la presentación de la campaña “En defensa de nuestros cuerpos y territorios” se presentaron los resultados del concurso ‘Defensoras y Defensores: violencia en conflictos ecoterritoriales’ que fue lanzado a inicios de año con el objetivo de que periodistas nacionales reflexionen y ayuden a la reflexión de los conflictos ecoterritoriales y la violencia que se ejerce contra defensores y defensoras, además de reconocer la necesidad de políticas de protección y atención desde el Estado ante la criminalización de la protesta, amenazas, muertes y violencia de género.
El PRIMER PUESTO es para Elmer Mamani, redactor del diario La República (Sección Sur-Arequipa), con el reportaje ‘La mujer que demando al Estado para hacer justicia para su comunidad”, que cuenta la historia de Melchora Surco Rimachi, una mujer de 64 años, que desde inicios del este siglo viene hablando de lo grave que pasa en su comunidad Alto Huancané, de la provincia de Espinar, Cusco. A ella como a 179 comuneros se les detectó 17 metales pesados en sus organismos en 2013. Melchora es estigmatizada por hablar de la contaminación que sufren las comunidades cercanas a las operaciones de la minera Glencore, que ahora está a cargo de Antapaccay-Tintaya. Demandó al Estado ante el Poder Judicial para que se les otorgue una atención especializada por su grave estado de salud. También acudió ante la Comisión Internacional de Derechos Humanos para exponer la violencia de género que sufre y las múltiples violaciones de derechos a los demás integrantes de su comunidad.
El SEGUNDO PUESTO es para Martín Vargas Barrera, autor del reportaje ‘La Dama del Bosque’, publicado en el diario El Peruano. Una crónica sobre Emma Tapullima, una de las dos únicas lideresas de comunidades indígenas que lideran una asociación para conservación en el país. Ella pertenece a la etnia kukama y rompió con el prejuicio y el machismo al convertirse en la lideresa de su pueblo, de la asociación y del área de conservación privada “Paraíso Natural Iwirati”.
Emma y las mujeres lograron convencer a su comunidad de volver intocables 100 hectáreas que estaban bajo la posesión de la comunidad. ¿Para qué? Para asegurar la despensa alimentaria, medicamentos naturales, tintes extraídos de brotes y hojas y, sobre todo, el agua que resguarda el bosque de la comunidad.
El jurado del concurso estuvo integrado por los las periodistas Rocío Silva Santisteban y Claudia Cisneros, así como el antropólogo Javier Torres Seoane.
El concurso fue organizado por la campaña #DefensorasNoEstánSolas integrada por la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, DEMUS, Flora Tristán, Entrepueblos y AIETI; y la campaña #YoDefiendo que impulsan el Instituto de Defensa Legal y la Comisión Episcopal de Acción Social.
